Propiedades catalíticas de la lipasa B de Candida antarctica inmovilizada en soportes magnéticos. Actividad sintética en disolventes orgánicos
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Fecha
2014-06-24Autor
Quesada Ganuza, Laura
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Mostrar el registro completo del ítemResumen
Este trabajo se centra en la inmovilización de la lipasa B de
Candida antarctica
en
nanopartículas magnéticas y la posterior caracterización cinética de su actividad
sintética en medios orgánicos para la pr
oducción de biodiesel.
La historia del biodiesel comienza en 1893, cuando Rudolph Diesel, el padre del motor
diésel, puso en marcha el primer motor de este tipo. Más tarde, en 1900, Diesel ganó
el Grand Prix en la Feria Mundial de París con su m
otor impulsado por un biodiesel
de aceite de cacahuete.
En 1903, además, comenzó la producción del Modelo T de
Henry Ford, diseñado para utilizar etanol como combustible.
Diesel creía que la utilización de biodiesel era el futuro de la automoción:
“
el uso
de
aceites vegetales como combustibles para motor puede parecer insignificante hoy en
día, pero estos aceites puede
n
convertirse, con el transcurso del tiempo, en
combustibles tan importantes como el petróleo y el carbón lo son hoy en día
”
Sin embargo, a p
artir de 1920, los fueles basados en petróleo comenzaron a ganar
terreno, debido a su mayor eficiencia, menor precio y mejor disponibilidad. De esta
forma, el mercado de los biofueles quedó relegado hasta que las distintas crisis del
petróleo (1973, 1979,
19
90) unidas a la creciente preocupación por la polución y la
c
onservación del medio ambiente, además de
al aumento de la población y por tanto
de la demanda de combustibles
,
llevaron a devolve
r la mirada a estos fueles
.
Fue en
esta época cuando comenzó, p
rincipalmente en EEUU y Brasil, la producción a gran
escala de biocombustibles de primera generación, basados en la utilización de
excedentes agrícolas como el maíz y la caña de azúcar
para la producción de bioetanol
y aceites de maíz y grasas animales par
a la producción de biodiesel
.