Algunas reflexiones en torno al prefacio del Informe Mundial sobre las drogas 2009
Eguzkilore: cuaderno del Instituto Vasco de Criminología (23) : 89-98 (2009)
Laburpena
Cuando se cumple un siglo del Acuerdo de Shangai sobre el control internacio-
nal del opio, Antonio Maria Costa, Director Ejecutivo de la
Ofi
cina de las Naciones
Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC)
, ha realizado el prefacio al
Informe
Mundial sobre las drogas 2009
1
, donde se llevan a cabo una serie de afi
rmacio-
nes contundentes y rimbombantes dignas de ser desmenuzadas para una posterior
refl exión en torno a las mismas y a otras declaraciones hechas por la misma persona.
El propio título,
Informe Mundial sobre las drogas 2009
, no se corresponde
con el contenido del texto porque, básicamente, hace referencia –cuando menciona
la tendencia mundial de los mercados, los consumos, las demandas de tratamiento y
a los estudios sobre juventud y escuela–, a las siguientes sustancias: opio y sus deriva-
dos, hoja de coca y sus derivados, cannabis, anfetaminas y al éxtasis. Mientras estas
sustancias disponen de varios apartados específi
cos, el alcohol y el tabaco no disponen
de ningún apartado para poder llevar a cabo la correspondiente comparación
2
. Un
organismo ofi
cial de Naciones Unidas (NN.UU.), cuando elabora un informe mundial
sobre cualquier cuestión –en este caso sobre las drogas–, por coherencia interna, debe-
ría abarcar todas las sustancias que desde otro organismo de NN.UU. –la Organización
Mundial de la Salud (OMS)– las cataloga como tales.