Efecto sinérgico Pt-Pd en catalizadores para almacenamiento y reducción de NOx y evaluación de resistencia hidrotérmica: sistemas monometálicos, multimetálicos y en combinación con reducción catalítica selectiva sobre Cu/chabazita
Ikusi/ Ireki
Data
2018-12-21Egilea
Castillo Ruiz de Azua, Julen
Laburpena
[ES] En el estilo de vida actual, el transporte se ha convertido en algo fundamental para el día a día
de la economía y la sociedad. La movilidad es vital tanto para el mercado interior como para
la calidad de vida que la libertad de viajar aporta a los ciudadanos. Asimismo, el transporte
permite el crecimiento de la economía y la creación de puestos de trabajo, por lo que está
estrechamente relacionado con el desarrollo económico de los países. Es por esto que en los
últimos años el número de vehículos está aumentando en todo el mundo a medida que las economías crecen, sobre todo en países aún en vías de desarrollo.
Uno de los problemas ambientales más importantes que se da actualmente es la
contaminación ambiental, siendo el transporte uno de los principales causantes de tal
problemática. Como consecuencia del gran número de vehículos existentes, la combustión
producida para impulsar estos vehículos provoca un porcentaje bastante alto de las emisiones
contaminantes atmosféricas. Por lo tanto, teniendo en cuenta que la tendencia del número de
coches seguirá en aumento, si no se establecen políticas para la limitación y control de las
emisiones, la contaminación atmosférica podría alcanzar valores insostenibles.
Desde hace unos años a aquí, el control de las emisiones se ha venido centrando en la
limitación o eliminación de hidrocarburos parcialmente quemados (HC), monóxido de carbono (CO), como producto de una combustión incompleta, la materia particulada (MP), especialmente materia carbonosa formada en los motores diésel, y los óxidos de nitrógeno (NOx), formados durante la reacción de combustión. Además, en estos últimos años se ha añadido al CO2, formado durante la combustión de combustibles fósiles, a este grupo de control debido a su enorme implicación en el agravamiento del cambio climático.Recientemente, muchos fabricantes de vehículos han propuesto a la electricidad como la
alternativa de futuro, desarrollando vehículos híbridos, eléctricos o eléctricos con pilas de combustible de hidrógeno. Sin embargo, el número de vehículos de este tipo sigue siendo bastante bajo debido principalmente a sus limitaciones. Actualmente, en Europa en torno al 95% de los vehículos tienen un motor de combustión interna, donde los motores diésel y de combustión pobre han adquirido una gran importancia con respecto a los motores de gasolina Otto convencionales, los cuales funcionan a una relación aire combustible estequiométrica (≈14,7:1). Esto es debido a que los motores diésel proporcionan una mejor economía de combustible y al emplear una menor cantidad de carburante producen menores emisiones de
CO2 en comparación con los motores gasolina. Sin embargo, debido a que operan con relaciones aire-combustible superiores a las estequiométricas (A/C, de 20:1 a 65:1), los NOx de los gases de escape de los motores de combustión pobre, no pueden ser eliminados eficientemente con los catalizadores TWC clásicos de los motores gasolina.
Por lo tanto, como consecuencia del aumento del número de coches diésel y de mezcla pobre (especialmente en
Europa) y debido a la ineficiencia de los catalizadores TWC para la eliminación de los NOx en estos, surge la necesidad de encontrar nuevas vías para la resolución de esta problemática. Para ello, se han propuesto distintas alternativas, siendo los tratamientos catalíticos de postcombustión los más prometedores, entre los que destacan: (1) la tecnología NSR, (2) la tecnología SCR y (3) la tecnología NSR-SCR combinada.