La percepción exterior de España durante el franquismo
Historia contemporánea 30 : 23-48 (2005)
Laburpena
Las imágenes nacionales no son sólo estereotipos despreciables sino simplificaciones inevitables formadas confusamente a lo largo de los siglos. Nos guste o no, debe reconocerse que estas esquematizaciones desempeñan un relevante papel en las relaciones internacionales, pues influyen en los gobiernos e intervienen en la conformación de las opiniones públicas. El franquismo fue muy consciente de la importancia de su imagen exterior e hizo todo lo que pudo para controlarla. Pero, para lo bueno y para lo malo, la imagen de un país no depende sólo de su gobierno o su régimen político sino de una suma compleja de factores: la España del franquismo se percibe desde fuera como una nación pobre y atrasada, que sale de una feroz guerra civil, pero también como un pueblo vigoroso que se sobrepone a las adversidades. Por eso, ante la "España diferente " del franquismo se manifiestan valoraciones contradictorias, desde la pervivencia del cliché romántico hasta la repulsa de un régimen represor, pasando por la abierta simpatía hacia un país ansioso de incorporarse a la modernidad.