Una apuesta por la supervisión como modalidad de IAP
Supervisión en trabajo social: una metodología para el cambio : 19-37 (2020)
Laburpena
La investigación en trabajo social se ha desarrollado relativamente tarde dentro del ámbito
de las Ciencias Sociales e incluso, en muchas ocasiones se ha abordado desde otras
disciplinas. No obstante, la definición del área de conocimiento “Trabajo Social y Servicios
Sociales” fue relevante para la investigación. Asimismo, la integración de la titulación al
Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) ha permitido consolidar el Grado en Trabajo
Social, dando paso a los estudios de posgrado y doctorado, dos de los hitos clave para el
desarrollo académico y científico. En este marco, la definición de líneas de investigación
fortalece la investigación en el área.
Desde esta consideración, en la Universidad del País Vasco UPV/EHU, se plantea una nueva
línea de investigación denominada “Trabajo social, intervención social y supervisión” que
pretende buscar un espacio de consolidación del trabajo social. Esta línea se fundamenta en
la construcción del conocimiento y en la mejora de la praxis profesional, lo que permite
orientar las políticas sociales y transformar la realidad social hacia el cumplimiento de los
derechos sociales para lograr una sociedad más justa e inclusiva. Se pretende investigar para comprender (entender más y mejor cada realidad social, incorporando otras formas de mirar y
complejizar) y para construir (mejorar la acción a la luz de la nueva información reconstruida).
Es decir, conocer, comprender, actuar, transformar y transformarnos, mediante
un proceso en espiral, crítico, reflexivo y participativo.
Como punto de partida de esta línea de investigación, proponemos la siguiente definición de
trabajo social que enmarca aquellas cuestiones claves relativas a la identidad profesional del
trabajo social:
El trabajo social, como disciplina y profesión reconocida, actúa en situaciones de dificultad,
necesidades o problemas sociales, en contextos de vulneración o de exclusión de derechos que vive la
ciudadanía en general, tales como carencia de recursos, situaciones de dependencia, violencia,
maltrato o situaciones de discriminación, entre otras. (…) Comporta acciones con las personas y sus
redes sociales, con colectividades y con entidades e instituciones sociales en todo el proceso, desde la
investigación, el diagnóstico y la planificación hasta las evaluaciones continuas, evidenciando y
previniendo situaciones y problemas sociales que afecten a las personas, y proponiendo estrategias
participativas de mejora y de transformación social.