dc.description.abstract | Desde el período preindustrial, la temperatura del aire en la superficie terrestre se incrementó aproximadamente en un 50 % la media global, lo cual repercute en un cambio climático que incluye aumentos de fenómenos meteorológicos, tanto en frecuencia como en intensidad, con extremos altamente peligrosos para toda clase de vida. Impactando negativamente en los ecosistemas marítimos y terrestres, acelerando su desertificación, auspiciando un alto estrés hídrico y una permanente degradación de los suelos. Conjunto de fenómenos que afectan directamente a la seguridad alimentaria de países y regiones enteras. Donde las regiones de mayor biodiversidad son las más sensibles a este cambio climático, regiones que coincidentemente son los territorios indígenas, relación que expresa que la biodiversidad tiene una amplia vinculación y correspondencia con los pueblos indígenas y naciones originarias. Pueblos y nacionalidades indígenas que tienen en su acervo más del 87,5% de los recursos silvestres conocidos, señalando una sustentabilidad y sostenibilidad alternativa a más de una resiliencia e interacción con los diferentes ecosistemas de larga data. Esto pese a la permanente acometida de la racionalidad colonial y del sistema capitalista a los recursos del medio ambiente y por ende a las comunidades vivas que dependen de estos recursos. Por lo cual la adaptación y resiliencia ante el Cambio Climático y la resistencia a la explotación capitalista, es vital, no solo para los pueblos indígenas sino sobre todo para la vida del planeta en general. Para lo cual develamos algunas estrategias que permiten a los pueblos y nacionalidades indígenas, en general, y en particular a Achuar, Kichwa, Shuar y Zapara, a ser resilientes, sin embargo, esto no implica que no estén expuesto y sean altamente vulnerables, por su concomitancia en ecosistemas megadiverso altamente sensibles, vulnerables al sistema económico, político y al cambio climático. | es_ES |