PAPP-A baja en el primer trimestre como predictor de pronóstico perinatal adverso
Fecha
2019-01-21Autor
Fernández Bonet, Amaya
Metadatos
Mostrar el registro completo del ítemResumen
[ES] La proteína plasmática A asociada al embarazo (PAPP-A) es una glicoproteína producida por la placenta cuya actividad es esencial en el proceso de placentación y crecimiento fetal. Niveles bajos de esta proteína en suero materno durante el primer trimestre de gestación son predictivos de anomalías cromosómicas, como la trisomía 21, la trisomía 13, la trisomía 18, triploidías y aneuploidías de cromosomas sexuales. Por esta razón, el cribado prenatal de cromosomopatías del primer trimestre incluye la medición de la PAPP-A y de la β-HCG, la translucencia nucal por ecografía y la edad materna. Además, niveles bajos de la PAPP-A se relacionan con complicaciones obstétricas como abortos espontáneos, crecimientos intrauterinos retardados, preeclampsia, partos pretérminos y oligoamnios .
Objetivos: El objetivo principal de este trabajo es evaluar la incidencia de anomalías cromosómicas y el pronóstico perinatal en las mujeres que han tenido niveles bajos de PAPP-A en el primer trimestre de gestación en el Hospital Universitario de Basurto durante el año 2015. Como objetivo secundario se ha establecido el determinar si la incidencia de estos eventos adversos que se estudian ha sido mayor cuanto menor era el valor de la PAPP-A.
Material y métodos: El estudio recogido en este trabajo es un estudio retrospectivo que incluye a todas las gestantes a las que se realizó el cribado bioquímico-ecográfico del primer trimestre en el Hospital Universitario de Basurto durante el año 2015. Se han seleccionado las gestantes cuyo nivel de PAPP-A en el cribado fue inferior a 0.4 MoMs (múltiplos de la mediana) y se han revisado sus historias clínicas a través de la aplicación “Clinic” de Osakidetza. Para analizar si los eventos adversos gestacionales se han dado con mayor frecuencia cuanto menor era el valor de la PAPP-A, se ha dividido a todas las gestantes que tuvieron la PAPP-A baja en dos grupos en función del valor de ésta, por un lado las que tenían valores entre 0.2 y 0.4 MoMs, y por otro las que la tenían por debajo de 0.2 MoMs. Posteriormente, se ha hecho un análisis descriptivo de los resultados obtenidos.
Resultados: El 6.86% de las mujeres que participaron en el cribado prenatal del primer trimestre en el HUB en el año 2015 obtuvo un resultado de PAPP-A baja. El 41.07% de estas gestantes sufrió algún tipo de evento adverso durante su embarazo, siendo los abortos espontáneos lo que se produjo con mayor frecuencia, seguido de las cromosomopatías y de los partos pretérminos. En cuanto al análisis de datos en función del valor de la PAPP-A, curiosamente, la incidencia de eventos adversos ha sido mayor en el grupo de gestantes con la PAPP-A entre 0.2 y 0.4 MoMs, que en las gestantes cuya PAPP-A era inferior a 0.2 MoMs. La única patología que se ha producido con mayor frecuencia en el grupo con la PAPP-A excesivamente baja (menor de 0.2 MoMs) ha sido el crecimiento intrauterino retardado.
Conclusiones: El elevado número de eventos adversos registrados en este estudio corrobora lo descrito por la bibliografía científica, que en las mujeres en las que se observa esta proteína baja durante el primer trimestre, la incidencia de complicaciones gestacionales es muy elevada. Sin embargo, se debe recalcar que el 58.93% de las mujeres a las que se detectó un nivel bajo de PAPP-A, tuvo una gestación normal, un parto eutócico y un recién nacido sano. Por lo que, el detectar esta proteína anormalmente baja debe alertar de la posibilidad de sufrir alguna anomalía gestacional, pero teniendo en cuenta que en más de la mitad de los casos de este estudio el curso gestacional ha sido normal.